Si alguien me brindara un trocito más de vida, sin duda, lo viviría de otra manera, aunque no hace falta esperar a que esto llegue, podemos cambiar la forma de ver y de disfrutar de la vida desde este momento.
Para empezar diría muchas más veces "te quiero" a mi familia y a mis amigos. Esto es algo que no se por qué razón pasamos por alto muchas veces sin tener en cuenta la gran importancia de esas dos palabras. Sobre todo a mis padres, mis abuelos, mi tío... no existen suficientes "gracias" ni suficientes "te quiero" para agradecerles todo lo que llevan haciendo por mí durante estos diecisiete años.
Tampoco me enfadaría, ni tendría rencor hacia nadie ya que esto al final no sirve para nada, como mucho para perder el tiempo, quitándoselo así a cosas que sí se merecen nuestro tiempo.
Disfrutaría mucho más de las cosas más sencillas, un gesto, unas palabras, un paisaje... Muchas veces estamos más pendientes de fotografiar lo que vemos para enseñarlo después que de parar, fijarnos y disfrutarlo con nuestros propios ojos.
Diría también que no pensaría en la muerte, pero me parece imposible. Es algo que, aunque no la veamos siempre esta presente en nuestro día a día. Cada minuto que pasa estamos más cerca de ella, pero está visión no merece la pena.
Cada momento en nuestra vida es único, y esta característica es lo que hace tan importante disfrutar de cada uno de ellos. Por otro lado, mi actitud ante la muerte me gustaría que fuera (digo que me gustaría que fuera, porque si me veo en esa situación no se si sabría enfocarlo con tanta fuerza, vitalidad y positividad como él) como la del protagonista de "Las alas de la vida", Carlos Cristos. Sin duda un ejemplo de como mirar a la muerte de frente y de luchar, luchar aunque las cosas sean complicadas.
Probablemente ese sea nuestro problema, que no pensamos en la muerte. No digo que sea un tema en el que haya que pensar a menudo pero no viene mal reflexionar sobre ello de vez en cuando para ver cuales son nuestras prioridades y valorar las cosas realmente importantes en nuestra vida.
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